muerte al padre, muerte al hijo y muerte al puto, espíritu santo. sí. odio a la palomita asquerosa que elimina en sus heces cryptococos neoformans, de las que se crean aerosoles, que al ser inhalados por inmunodeprimidos, party party... pero eso es otra historia, y muy freak.
como iba diciendo muerte.
últimamente me debato entre la vida y la muerte... sí, dudo si entre secuestrar a una serie de individuos (que invaden mi nicho... mi nicho ecológico) y torturarles hasta la muerte, lo cual sería sumamente excitante, fantasioso, gore y satisfactorio.... o simplemente torturarles hasta la locura. lo cual sería como haber probado la cocacola normal una vez, y que luego te den cocacola zero. a mi eso del gato por liebre, me daba igual a ornitorrinco partido de dos... así que trataré de hacer un apaño.
En fin, no sé por cual de las dos optaré, pero a ti, querido lector.... no sé si te lo contaré :P.
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