sábado, 1 de octubre de 2011

hombre de hojalata....

ultimamente no sé que me pasa, he perdido la ilusión, la actividad, el entusiasmo, y la sensación, he asesinado mi libido, perforado mi alegría, y vacíado mis sentimientos, he decidido cortar por lo sano... amputar, cortar, trocear y triturar cualquier tipo de aderezo a mi propia amargura, mi mejor aliño, y peculiar condimento.
he decidido ser el aceite que flota sobre el agua, un mar de simplezas, de tonterías y fantasías. he decidido ser lo contrario a cualquier exceso emocional, he decidido dañarme limbica y difusamente, para no experimentar más emociones. me aburrís. me aburren. os aburrirán. me he autodiseñado para sentir solo un concepto, el de amor propio, el de quererme a mí más que a nadie, he decidido pasarme el pasaje bíblico del amaos los unos a los otros por el forro de los testículos, vulgarmente llamado epidídimo. me podeis llamar simple, porque tengo un exoesqueleto de indiferencia... digan lo que digan, cualquier tipo de relación humana conduce al dolor, al aburrimiento, a lo inesperadamente idiotesco.
las emociones son un cancer, y yo he decidido aplicar mi propia radioterapia, mutilarme en silencio mientras me dan por culo los isótopos en una danza tribal y salvaje. he decidido, arrancarme la matriz, extirparme las gónadas, arrancarme los senos, y obliterar las cavidades de la pútrida bomba que me sustenta con un mixoma.
he decidido aplicar mi propia quimioterapia, quiero vomitar hasta la última gota de aliento, la última gota de necesidad, la última chispa de humanidad, el último rastrojo de amor al prójimo.
He decidido involucionar, encerrarme en un huevo, con unas faneras totalmente inquebrantables, ser un saurio en un caparazón lleno de apófisis puntiformes, agujas y todo tipo de instrumentos de tortura.
he decidido ser tóxico, volátil y duro. he decidido no abrirme mas. he decidido tomar mis decisiones. he decidido no decidir más... he decidido extirparos, destriparos y prostituiros.
me sobrais. me hartais. me molestais. me pudrís. prefiero ser enterrado vivo... a morir un poco más cada día.
quiero producir dolor, dañar, quemar, desquebrajar, estallar y asfixiar.
me gusta el nuevo yo que estoy diciendo, no tengo miedo a la soledad, ya me habían dicho que iba a acabar solo. probablemente acabaré siendo un psicópata, un loco o un perturbado, pero me da tan igual... me es todo tan indiferente, soporífero e insignificante. he decidido ascender, iluminarme, regir, hasta que un infarto o cualquier otro tipo de enfermedad vascular, un mutilador accidente o un suicidio planificado acabe con mi tortura. no me da miedo desaparecer, ni descomponerme.... ser un rico placer para los gusanos me hace eyacular, me deja inconsciente. en serio, olvidadme. es mejor.

un hombre de hojalata que no buscaba un corazón, solo un campo de chatarra en un día demasiado bipolar magneticamente hablando. habra quien diga que yo soy así, puede que sea verdad, que me da igual lo que digan me la suda también demasiado, pero creo que todos tenemos a un hombre de hojalata, al que a veces no hacemos el suficiente caso. que os jodan gente. xD

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